jueves, 26 de junio de 2014

"Dublin Street" de Samantha Young

Dublin Street es una novela muy cortita que había leído que la metían en el género de erótico pero creo que no debe ser llamado así. La historia la cuenta Joss, una joven que busca piso en Edimburgo. En cuanto se muda con Ellie, conocerá a cierto personaje que se convertirá en el protagonista de esta historia.

Tiene un fondo trágico que me encanta y es que yo soy así, no me gusta que todo sean maravillas y la gente sea feliz. No es que me gusten los muertos pero es que en la vida real las cosas malas suceden y por desgracia, muy a menudo. Como decía, ese fondo le da un punto interesante al principio de la historia. Esto y los personajes bien definidos, con sus pensamientos y sus realidades.

Me habría gustado que la historia fuera más larga porque habría dado de sí. Podría haber contado más historias o haberse metido más en profundidad en los personajes secundarios. Ha sido como un resumen de la historia, muy ameno, rápido, que te hace reír en algún momento y llorar en otros tantos.

En cuanto a lo de erótico pues sí, tiene momentos, pero que sólo se llaman así porque el vocabulario es bastante explícito pero por lo demás… no os dejéis engañar. Es una historia de amor.

¿Qué más me ha gustado? Pues un párrafo de los agradecimientos me ha parecido bastante interesante.

Pena y pérdida son probablemente las criaturas más temibles que existen. Pueden enseñarnos a preocuparnos por el futuro, a cuestionar la longevidad de la satisfacción y demostrar la incapacidad de disfrutar de la felicidad cuando la tenemos. Pero la pérdida no debería ser una criatura a la que temer. Debería ser una criatura de prudencia. Debería enseñarnos a no temer ese mañana que podría no llegar y a vivir de manera plena como si las horas se estuvieran fundiendo como segundos. La pérdida debería enseñarnos a apreciar a los que queremos, a no hacer nunca algo de los que luego arrepentirnos y a vitorear el mañana con todas sus promesas de grandeza.

Nota: 4/5
Cris

1 comentario: